¿Quieres adentrarte en películas donde los directores despliegan un estilo atrevido, empapan escenarios en sangre y desafían los límites? Las películas de V/H/S son la elección perfecta. Inició como una antología de terror found footage de bajo presupuesto en 2012, presentando algunas de las voces más emocionantes del género como David Bruckner (La casa oscura), Ti West (Pearl) y Adam Wingard (Godzilla vs Kong).
Hoy, la franquicia sigue cautivando a los fanáticos del género ansiosos por cada nueva entrega. La sexta y más reciente, VHS 85, disponible en las salas de Cinépolis y Cinemex, cuenta no solo con el talento de Bruckner y Scott Derrickson (el director detrás de Doctor Strange y El teléfono negro) sino que también destaca la participación y creatividad de una actriz y directora mexicana.
Shudder
Gigi Saul Guerrero, la cineasta nacida en la Ciudad de México y radicada en Canadá, ha construido una sólida carrera dentro del terror con dos largometrajes y una extensa colección de cortometrajes. En VHS 85, Guerrero nos sumerge en las profundidades de Dios de la Muerte, presentado como una caótica transmisión de noticias de televisión es interrumpida por un desastre natural y aún más trastocada por un evento sobrenatural que involucra una antigua fuerza mítica.
Del found footage al mito antiguo: 'VHS 85' y la magia del terror de Gigi Saul Guerrero
Ubicado en el devastador terremoto de 1985 en la Ciudad de México, el segmento comienza con un equipo de noticias de televisión aplastado por el concreto que cae durante el fatídico temblor. Luego, un equipo de rescate ayuda al único superviviente (Ari Gallegos) en un intento de huir del edificio, descubriendo rincones en ruinas que revelan un aterrador secreto asociado a violentos rituales y sacrificios humanos.
Shudder
Como admiradora de La piel que habito de Pedro Almodóvar y Santa sangre de Alejandro Jodorowsky, el cine de Guerrero busca amplificar las voces de las minorías. Con Blumhouse Productions, Guerrero ofrece plataformas para las voces marginadas. Su debut en largometrajes, Culture Shock, aborda la travesía de una joven mexicana (Martha Higareda) hacia Estados Unidos, reflexionando sobre las dificultades migratorias y la deshumanización en el sistema estadounidense.
Su segundo filme, Bingo Hell, se sumerge en un vecindario amigable de Oak Springs. Aunque no es una historia exclusivamente latina, aborda problemáticas que afectan a minorías debido a la gentrificación. Siguiendo a la abuelita Lupita (Adriana Barraza), una figura entrañable en los hogares mexicano-estadounidenses, la película explora la resistencia de personas mayores contra la opresión personificada en Mr. Big (Richard Brake), representante de la violencia y opresión destructiva.
