Robert Zemeckis, el director, ya compartió el primer avance oficial del live-action del clásico de Disney, Pinocho. ¿Una sorpresa? A decir verdad, no. En el avance conocemos tal cual la historia con la que crecemos muchísimas generaciones: Gepeto (Tom Hanks) es un carpitero deseando convertirse en padre y sólo lo logra con el favor de un hada madrina (Cynthia Erivo), quien convierte a la marioneta en el famoso niño de verdad (Benjamin Evan Ainsworth). Estará disponible en Disney Plus el 8 de septiembre.
La emoción por verla radica en el traslado de la animación a la vida real con ayuda de la tecnología y grandes actores, replicando tal cual varias de las acciones de este cuento escrito por el italiano Carlo Collodi. Por ejemplo, el secuestro de Pinocho por parte del cirquero Estrómboli (Giuseppe Battiston), la búsqueda de Gepeto con el grito de agonía "¡Pinocho!" cuyo eco es imperdible; y la presencia de Pepito Grillo (Joseph Gordon-Levitt) siendo atrapado en una botella.
Y están todos los personajes: el gato Fígaro, el pececito dorado Cleo, el zorro honesto (Keegan-Michael Key) y la ballena jorobada que se come completo el barco de madera con toda la pandilla reecontrándose tras escapar de la isla del placer; a propósito, lo único que nos quedó a deber estos breves minutos de avance, los burros. Recordemos que cuando Pinocho y el resto de los niños arriban a la isla, todos caen en vicios: billar, cerveza, puros, etc.
Suponemos que para evitar malos entendidos suprimieron esa parte por parte de los padres de esta nueva generación, no dar pavor a los chicos, evitar polémicas por maltrato animal porque, recuerden, los burros eran llevados para hacer labores de esclavitud casi casi. Como podrán ver, a excepción de eso, la película no es un vistazo distinto a lo conocido; sí actualizada para la nueva generación. Sin embargo, sí están varios asnos jalando una carreta. Pongan atención lo verán.
Hasta ahora la versión más original parece ser la que Guillermo del Toro ha filmado para Netflix, pues propone una visión máqs oscura y que recae en el concepto de los buenos padres y los males hijos.