Duro de cuidar

Después de fracasar notablemente en su última misión, el otrora implacable guardaespaldas Michael Bryce (Ryan Reynolds) ha caído en desgracia, dedicando sus asombrosas habilidades para el cuidado de altos ejecutivos adictos a las drogas. Al mismo tiempo, el sangriento dictador Vladislav Dukhovich (Gary Oldman) esta siendo juzgado por sus crímenes contra la humanidad, en una corte internacional. El veredicto y destino del cruel dictador dependerá del testimonio de un asesino a sueldo, Darius Kincaid (Samuel L. Jackson) quien ha accedido a hacerlo a cambio de la exoneración de esposa Sonia (Salma Hayek)

Mientras Kincaid está siendo escoltado hacia la corte, su convoy es emboscado y sólo él y la agente Amelia Roussel (Élodie yung) sobreviven. Amelia tuvo un pasado complicado con Bryce, pero es en la única persona en quien confía para escapar con vida de la situación y cumplir su misión de llevar al asesino a dar su testimonio. Sin embargo, Bryce y Kincaid son antiguos enemigos, responsables de atentados previos y con resentimientos longevos. A pesar de todo, ambos tendrán que trabajar juntos durante 24 horas, sin quieren sobrevivir y acabar con el dictador, de una vez por todas.