Mahsa Rostami es una emergente actriz iraní que se encuentra conquistando la industria cinematográfica. Durante su adolescencia, Rostami soñó con aparecer en la gran pantalla gracias a que sus padres le inculcaron un enorme cariño por el séptimo arte. Sin embargo, tras haber estudiado la licenciatura de actuación, su carrera se vio truncada debido a un altercado policial que tuvo junto a sus compañeras Niousha Akhshi y Setareh Maleki. Afortunadamente, obtuvieron ayuda del reconocido cineasta Mohammad Rasoulof, quien tras descubrir su verdadera historia, se dispuso a crear un guion a partir de sus experiencias, para posteriormente filmarlo en completo secreto en las calles de Irán.
Con el lanzamiento de ‘The Seed of the Sacred Fig’, Mahsa logró finalmente cumplir su sueño de aparecer en alguna producción cinematográfica, sin embargo, luego de tener un severo problema legal por estelarizar dicho filme, Rostami se vio obligada a huir de su país junto con sus amigas con el objetivo de que pudieran escapar de este gran altercado en el que se les acusaba injustamente de complot contra su país. Tiempo después, pudo encontrar un nuevo hogar en la ciudad de Berlín, donde en los últimos tiempos, ha alcanzado cierto reconocimiento a nivel internacional con el estreno del filme en el prestigioso Festival de Cine de Cannes, donde la cinta logró hacerse con el premio especial del jurado.