Adam Benjamin Elliot es un renombrado director, guionista y animador australiano, nacido en el suburbio de Berwick, Victoria. Criado en el seno de familia de padres trabajadores, Adam pasó por un complicado momento luego de que la granja de camarones de su padre fuera a la quiebra, razón que lo obligó a buscar nuevas oportunidades laborales en la ciudad de Melbourne. Inicialmente, su principal ambición estaba enfocada en convertirse en veterinario, pero al no obtener el promedio necesario para ingresar a la Universidad, decidió continuar con el antiguo legado que su padre había formado anteriormente como payaso en un circo, pero ahora dándole un enfoque completamente diferente cuando decidió estudiar interpretación en el Colegio Victoriano de las Artes.

Tras graduarse con honores de la universidad, comenzó a destacarse en la escena artística actuando en obras como ‘Sherlock Holmes', mientras vendía camisetas pintadas a mano por el mismo. Durante esta época, optó por apartarse de los escenarios para especializarse en el ámbito cinematográfico, especializándose en el área de animación, género que se convirtió en su principal medio para contar historias. A finales de la década de los 90, debutó con una serie de cortometrajes independientes titulados ‘Uncle’, ‘Cousin’ y ‘Brother’, mismos que relataban de manera tragicómica temas basados en su familia o experiencias propias, sello distintivo que ha empleado en la gran mayoría de sus trabajos.

En 2003, su nombre terminó por volverse mundial al haber sido galardonado con un Óscar en la categoría de mejor cortometraje animado por ‘Harvie Krumpet’. Desde entonces, su estilo se caracteriza por realizar animaciones en arcilla inspiradas ya sea en su propia biografía o la de sus amigos y familiares. Entre sus trabajos más destacados se encuentran ‘Mary and Max’, ‘Ernie Biscuit’ y ‘Memorias de un caracol’, cinta que lo hizo acreedor a su segunda nominación a los Premios de la Academia.