A principios de la década de 1980, Andrzej Bartkowiak fue director de fotografía en tres películas que recibieron nominaciones a los Premios de la Academia a la Mejor Película: La fuerza del cariño (1983) dirigida por James L. Brooks; el drama de John Huston El honor de la familia Prizzi (1985), y Será justicia (1982) de Sidney Lumet, con quien Bartkowiak desarrolló una estrecha relación de trabajo, actuando como director de fotografía en casi todas sus películas, empezando con Príncipe de la ciudad (1981) y Guilty as sin (1993). Bartkowiak hizo su debut como director con Romeo debe morir (2000), una película de acción de artes marciales protagonizada por Jet Li y Aaliyah. Un año después, hizo la película de acción y suspenso Exit Wounds (2001), protagonizada por Steven Seagal. En 2010, trabajó como director de fotografía en el thriller Sin salida, dirigido por Joel Schumacher, con quien ya había colaborado antes en Un día de furia (1993).