Después de años en la industria del entretenimiento, en la que se desarrolló mayormente en la edición, el surcoreano Kim Chang-hoon hace su debut como director con Hopeless (2023), una película negra que narra la historia de un chico llamado Yeon-gyu (Hong Sa-bin) que quiere escapar de la infernal realidad en la que vive, y su viaje al mundo del crimen organizado después de conocer a Chi-geon (Song Joong-Ki). Hopeless fue elegida para competir en la sección Un Certain Regard del Festival de Cine de Cannes.