Fanáticos peligrosos: estrellas que se casaron con sus fans (y algunas historias que terminaron muy mal)
Jessica Campos
-Redactora
Algunas de mis películas favoritas son 'Birdman', 'Begginers' y 'L'âge atomique'. El cine de terror me da miedo, me gustan los comics, y mis géneros favoritos son la fantasía y la animación. Estudié Comunicación en la UNAM y algún día terminaré la carrera de Historia en la FFyL.

Si bien muchas de estas personas hicieron su sueño realidad, los famosos no siempre estuvieron a salvo de la obsesión de sus seguidores.

En el mundo del entretenimiento, el vínculo entre celebridades y admiradores se ha vuelto cada vez más complejo y gracias a las redes sociales, la distancia entre artistas y público parece reducirse, facilitando las interacciones antes improbables. Sin embargo, esto permitió en el pasado que algunos fans establecieran relaciones sentimentales reales con sus ídolos, convirtiéndose incluso en sus parejas formales y llegando hasta el matrimonio con ellos.

Pero como era de esperar, también tuvimos historias en las que dicha admiración se transformó en obsesión y terminó por provocar consecuencias sumamente graves así que aquí te mostraremos algunas de estas historias.

Famosos que se casaron con sus fans (y el caso que salió mal)

John Travolta y Kelly Preston

Ambos conformaron uno de los matrimonios más estables de Hollywood surgidos a partir de la admiración, ya que Preston había sido fan declarada del actor desde joven y, tras coincidir en proyectos profesionales, ambos iniciaron una relación que culminó en matrimonio en 1991. Su unión se mantuvo sólida durante décadas, convirtiéndose en un ejemplo recurrente de vínculos originados en la dinámica fan–celebridad.

Nicolas Cage y Alice Kim

El actor contrajo matrimonio con Alice Kim en 2004, después de conocerla en el restaurante donde ella trabajaba y donde también lo admiraba como figura pública. La pareja permaneció junta por más de una década, pero su separación en 2016 marcó el cierre de una relación frecuentemente citada en estudios sobre matrimonios entre celebridades y admiradores.

Selena Quintanilla y Yolanda Saldívar

El caso de Selena Quintanilla y Yolanda Saldívar representa el extremo más oscuro de la relación entre una figura pública y una fan. Saldívar inició como admiradora de la cantante, llegó a dirigir su club oficial de admiradores y posteriormente su boutique, pero desarrolló una fijación emocional que investigadores han descrito como obsesiva. El vínculo se deterioró tras irregularidades financieras y terminó en el asesinato de Selena en 1995, con un hecho que se considera uno de los episodios más graves de estas dinámicas.

Anne Hathaway y Adam Shulman

La actriz favorita de Disney inició su relación en un contexto más equilibrado, y aunque él había sido admirador de su trabajo antes de conocerla personalmente, su matrimonio resultó un éxito y fue celebrado en 2012. Ambos se han mantenido juntos desde entonces y con un perfil bajo, alejado de controversias.

Gary Coleman y Shannon Price

El actor Gary Coleman protagonizó uno de los casos más conflictivos derivados de la relación con una admiradora ya que Shannon Price, quien inicialmente fue fan de su carrera, inició una relación sentimental con él que avanzó hasta el matrimonio. Sin embargo, la dinámica se volvió tensa y altamente mediática, marcada por acusaciones mutuas, episodios de control y disputas legales.

Billie Joe Armstrong y Adrienne Nesser

Por último cerramos con otro caso de éxito entre Billie Joe Armstrong, vocalista de Green Day, y Adrienne Nesser a quien conoció durante un concierto en los años noventa. Ella era seguidora de la banda y asistía regularmente a sus presentaciones además de tener su propia agrupación, por lo que la relación avanzó con rapidez y culminó en matrimonio en 1994, manteniéndose vigente hasta la actualidad.

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