Mientras que películas como Dunkerque y Salvando al soldado Ryan acercan al espectador a distintos frentes de batalla, hay cintas que se llevan los ojos de la audiencia a un escenario que muchos desconocen: el mar. 1917 sobresalió por mostrar la travesía de un soldado desde que le es asignada una misión en tierra firme y atraviesa un sinfín de obstáculos hasta que la cumple por completo, pero ¿qué hay de aquellos que combaten desde un barco o un submarino?
En 1981, el director Wolfgang Petersen presentó al público no sólo alemán, sino especialmente al hollywoodense, su propio retrato de la Segunda Guerra Mundial, pero desde el interior de un vehículo bajo el agua. Adaptando la novela homónima de Lohar-Günther Buchheim, publicada en 1973, el cineasta germano plasmó en cinta la experiencia de aquellos soldados de las potencias del eje que pelearon en el submarino U-96 en la Batalla del Atlántico.

El escenario es un submarino alemán en la Segunda Guerra Mundial, donde un grupo de soldados jóvenes, dispuestos a defender su patria de los Aliados, viven en carne propia el defenderse de los posibles enemigos que se encuentren en la superficie del mar, además de atravesar una compleja convivencia dentro de la nave, pues el enclaustramiento pronto los hace lidiar con la idea de que se trata de una misión suicida.
Das Boot, cuya traducción al español se convirtió en el título El submarino, figuró como uno de los grandes éxitos del cine bélico en los años 80, especialmente la versión más conocida de 149 minutos, pues originalmente tenía un metraje de 209 minutos. Su éxito no sólo recayó en las audiencias, sino también en la temporada de premios, ya que fue una de las más nominadas en la edición 55 de los Oscar.

Nominada a seis categorías de los premios de La Academia, El submarino sobresalió como Mejor fotografía, Mejor dirección, Mejor edición, Mejor sonido, Mejores efectos de sonido, y Mejor guion; mientras que en plataformas como Rotten Tomatoes fue calificada con 98 por ciento de aprobación, además de que logró seducir a Roger Ebert, uno de los críticos más famosos de dicha disciplina.