Si hablamos de películas sobre viajes en el tiempo y sus consecuencias, es imposible no pensar en Volver al Futuro. La legendaria trilogía dirigida por Robert Zemeckis no sólo se convirtió en un ícono ochentero, sino en una de las franquicias de ciencia ficción más queridas de todos los tiempos, codeándose con titanes como Star Wars y Terminator sin despeinarse.
Desde su primer entrega en 1985, la saga protagonizada por Michael J. Fox y Christopher Lloyd ha hecho soñar a generaciones enteras con la posibilidad de modificar el pasado, arreglar el presente y curiosear un futuro lleno de autos voladores que todavía seguimos esperando. Y como buen clásico del cine, Volver al Futuro se ha estudiado con detalle. Aunque han pasado décadas desde su estreno, hay fans tan dedicados que han pausado, rebobinado y analizado cada segundo de la película.

De entre todos los detalles escondidos, uno de los más curiosos aparece justo en el minuto 12 con 30 segundos. En la escena, aparece Marty recién aterrizado en el futuro, paseando por Hill Valley en 2015. De repente, el chico se detiene frente al escaparate de una tienda que, a simple vista, parece ser una boutique de objetos retro. Sin embargo, son los artículos ahí escondidos los que han dejado con la boca abierta a los espectadores más atentos.

En la secuencia mítica, Marty observa una tienda llamada "Blast from the Past", especializada en artículos de los años 80. Si bien el famoso almanaque deportivo es la estrella del momento, hay otros objetos curiosos que se roban un pedazo de atención. El primero es un peluche de Roger Rabbit, como un guiño directo a ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, otra cinta legendaria dirigida por Robert Zemeckis.
También se puede apreciar una referencia a Tiburón, obra maestra de Steven Spielberg, amigo de Zemeckis y productor ejecutivo de la saga. Además, aparece un frisbee con forma de disco metálico, que algunos fans han interpretado como una pequeña premonición del disco de feria que Marty usaría para defenderse en Volver al Futuro 3.

Lo cierto es que nada de esto es casualidad. Robert Zemeckis y Bob Gale, guionista de la trilogía, eran fanáticos de dejar guiños visuales para los fans más observadores. Cada detalle en la saga fue diseñado para hacer que la experiencia se volviera aún más emocionante, sobre todo, cuando llegaba la oportunidad de ver las películas en casa.
