En medio de la euforia por ver los nuevos live-action de películas como Lilo y Stitch y Cómo entrenar a tu dragón no es extraño que adultos y jóvenes llenen las salas de cine, pero también es cierto que hay nuevas generaciones de niños que van a conocer por primera vez estas historias en un nuevo formato. Y justamente una pareja llevó a sus dos hijos de preescolar al cine para disfrutar la película del alienígena azul con su amiga de Hawái, pero se llevaron una mala experiencia cuando las escenas gráficas del avance de M3GAN 2.0 aparecieron en pantalla.
Robert y Jenny Ellice relataron que fueron con sus hijos de cuatro y cinco años a ver Lilo y Stitich a un complejo de Cineworld al norte de Londres, pero cuando aparecieron "salpicaduras de sangre" y "gritos" en la pantalla grande se vieron obligados a cubrir los ojos de sus hijos y abandonar la sala de cine, según recupera BBC.
Universal Studios
De acuerdo con el padre de familia, el avance en cuestión mostraba a la muñeca asesina "atacando a alguien con un cuchillo y sangre por todas partes" convirtiendo el momento en algo "realmente desagradable". Narran también que el avance para la película de horror dirigida por Gerard Johnstone se volvió muy gráfico demasiado rápido añadiendo gritos y groserías al contenido explícito.
El Sr. Ellice entonces les pidió a sus hijos que se taparan los ojos para luego salir de la sala e iniciar una queja con el cine que proyectó estas imágenes de una película que en Reino Unido está permitida para mayores de 15 años antes de que comenzara Lilo y Stitch, película apta para todo público.
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La madre de familia por su parte mencionó que al salir de la sala de cine sus hijos "estaban en estado de shock" ante la violencia en pantalla. "Su mundo se compone de Peppa Pig y de qué dulces les va a dejar comer su mamá. No saben ni que existe este tipo de cosas [la violencia]", dijo para BBC la Sra. Ellice.
La pareja dijo que el personal de Cineworld se disculpó con ellos y les explicó que todo se debió a un problema técnico, pero para entonces sus hijos ya estaban "demasiado asustados" como para quedarse a ver la película protagonizada por Maia Kealoha y el experimento 626.