Ryan Reynolds tiene cuatro actores especialistas para realizar las escenas más rudas de sus películas. A este equipo, lo vimos ya en acción en Deadpool 2, por ejemplo. La decisión de contratarlos ocurrió a raíz de una lesión que Reynolds tuvo durante el rodaje de Protegiendo al enemigo en 2012, en la que se fracturó una vértebra del cuello interpretando a un agente de la CIA. Cuentan que el doctor que trató al antihéroe de moda le dio una receta donde le preescribió 'usar dobles'.
Peleas, explosiones, choques de auto... ¡Los siguientes actores eligieron no tomar riesgos! ¿Les das la razón?