Una de las escenas más memorables de la serie, es cuando Walter White en un ataque de enojo, avienta la pizza que traía en las manos hacia el techo de su casa. Según cuenta la producción, fue un momento muy feliz para todos ya que Bryan Cranston atinó a lanzar la pizza en la primera toma, lo cual no creyeron que fuera posible. Lo negativo tras el rodaje, fue que algunos fanáticos de Breaking Bad llegaron a ir a esta locación a recrear la escena, lo cual era súmamente molesto para los verdaderos habitantes de este hogar. En 2015, Vince Gilligan, el creador de la serie, tuvo que pedir al público que dejaran de molestar.