Ya hablamos del genio indiscutible de Benedict como Holmes, pero qué tal Martin Freeman como el gran Watson. Es el apoderado que Sherlock envía para iniciar investigaciones preliminares, es un oficial médico, es capaz de engañar a su amigo más cercano con un sólo golpe. Entonces, mientras conocemos a Sherlock Holmes a través de los ojos de Watson, también empezamos a ver a Watson como un hombre de acción, un héroe por derecho propio.