La secuela de la exitosa Los Cazafantasmas (1984), nos sitúa cinco años después de la primera parte. Cuenta cómo estos exterminadores de seres sobrenaturales se encuentran en el olvido debido al bajo índice de eventos paranormales en Nueva York. Mientras todos andan con la guardia baja, se dan cuenta de que Oscar, el pequeño bebé de su amiga Dana Barret, está siendo achechado por Vigo, un hechicero del más allá que vive en una pintura y quiere reencarnar en plenas fiestas decembrinas.
La escena más conmovedora, es cuando todo Nueva York canta para vencer a Vigo.