El director Guillermo F. Navarro tomó como inspiración los constantes casos de tratas de personas que leía en el periódico, lo que lo llevó a ponerse en el lugar del las víctimas y a tratar de comprender el inmenso dolor y angustia que experimentaban.
Después de varios años de investigación el director Guillermo F. Navarro utilizó los dos casos más severos de un archivo de docenas de casos de trata de personas, para resaltar y crear conciencia sobre esta horrible problemática que sucede en Argentina y todo el mundo.