En Youth (Hard Times), documental y segunda parte de la trilogía del cineasta Wang Bing, se exploran las luchas de los trabajadores migrantes en los talleres textiles, capturando sus luchas diarias para sobrevivir con salarios bajos y explorando la posibilidad de empoderamiento colectivo a medida que la economía china crece. En Zhili, una provincia donde los trabajadores migrantes temporeros se instalan en talleres que parecen tener sus propias reglas y jerarquías idiosincrásicas, la continuación de Bing relfexiona sobre una ansiedad colectiva, con un hilo conductor cada vez más extendido, en la que los dueños de talleres corruptos se las ingenian para no pagar a sus empleados, siguiendo a un joven no sabe cómo cobrar su salario porque no puede mostrar la nómina que le exige su empleador actual, aunque tiene una foto de ella. Mientras estos jóvenes trabajan, se desarrolla un patrón a medida que luchan in cesar por tarifas fijas sobre los materiales que están completando, donde la frase ganamos lo suficiente para vivir, ni siquiera es real para muchos de los jóvenes que se espera que envíen dinero a casa para ayudar a sus familias.