La pionera contrabajista Orin O'Brien nunca quiso ser el centro de atención, lo único que le importaba era la música y su crecimiento en ella. Pero cuando el legendario Leonard Bernstein la contrató, en 1966, como la primera mujer músico de la Filarmónica de Nueva York, era inevitable que se convirtiera en el foco de atención y fascinación. Ahora, con 87 años y recientemente jubilada, Orin recuerda su notable vida y carrera, los éxitos y las caídas, insistiendo en que no se debe hacer un escándalo sobre ella y optando por desempeñar un papel secundario para la familia, los estudiantes, los amigos y los colegas que la rodean. Con el cortometraje documenta La única mujer en la orquesta, la cineasta Molly O'Brien captura, de manera única y asombrosa, las prodigiosas contribuciones de su tía Orin como músico, así como su filosofía única de que la clave para disfrutar de la vida es desempeñar un papel secundario.
0:58