El productor y creador de la historia de la cinta, Steven Spielberg, dirigió personalmente al menos una de las escenas de esta película.
Según Sean Astin, se le permitió conservar el mapa del tesoro utilizado en la película. Varios años después, su madre, Patty Duke, lo descubrió, pensó que era solo un pedazo de papel arrugado y lo tiró a la basura.
El barco pirata que se utilizó para la filmación era real, cuando terminó la cinta nadie lo quiso, así que el barco fue destruído.
El cráneo de Willy de un solo ojo estaba hecho de hueso real.
Para las velas se utilizaron 7,000 pies cuadrados de tela, la más grande fue de 30 pies por 60 pies. Algunos de los aparejos de la nave fueron reciclados para el barco de Piratas del Caribe en Disneyland, que en ese momento estaba siendo renovado.