Cheque en blanco

Un niño de 12 años, llamado Preston Waters, un día es atropellado accidentalmente por un criminal, dejando su bicicleta totalmente arruinada. Para deshacerse rápidamente del chico y no tener problemas con la policía, le entrega un cheque para cubrir los daños, firmando precipitadamente sin darse cuenta que lo había dejado en blanco. Preston decide completar el espacio con una “simbólica” cantidad de un millón de dólares, y cuando consigue cambiarlo en el banco su vida cambia radicalmente. Sin embargo, cuando el delincuente se da cuenta de lo ocurrido, prepara todas las armas de las que dispone para recuperar su dinero.