Los abrazos rotos

En Los abrazos rotos, Harry Caine (Lluís Homar) es un guionista viejo, ciego y amargado que vive en Madrid. Lo ayudan a realizar sus tareas cotidianas Judit (Blanca Portilla) y su hijo Diego (Tamar Novas). Un día un hombre visita de manera sorpresiva a Harry para contarle que su padre, Ernesto Martel (José Luis Gómez), ha muerto. El hecho dispara las memorias del pasado de Harry hasta los años 90. En aquel entonces él era un afamado director de cine, se hacía llamar Mateo Blanco y se enamoró perdidamente de Lena (Penélope Cruz), la amante de Ernesto. Cuando Mateo le ofrece un papel a Lena en una cinta financiada y producida por Ernesto, éste manda a su hijo a filmar un detrás de cámaras par vigilar lo que Mateo pueda llegar a hacer con la mujer a la que ama. ¿La consecuencia? Un verdadero choque de trenes…