Durante la cinta y su promoción antes del estreno, se menciono que se tomaba inspiración de un caso real, mostrando incluso segmentos grabados con la supuesta Dr. Abigail Tyler y algunos segmentos de noticieros en Alaska. En realidad, la cinta es una historia ficticia y quien se aseguraba ser la verdadera doctora Tyler es, en realidad, la actriz Charlotte Michard.
El guion fue parte de la Blacklist de 2008, listado que muestra los mejores guiones del año que no han sido producidos.
Las entrevistas falsas de la película enojaron a las familias de personas desaparecidas, en la realidad, en Nome, Alaska y sus alrededores. Melanie Edwards, vicepresidenta de Kawerak Inc. (una organización que representa a los pueblos indígenas de Alaska), describió la película como "insensible a los familiares de las personas que han desaparecido en Nome a lo largo de los años".