Para ahorrar dinero, no se rentaron tráilers para los actores. En su lugar rentaron una casa a la que pudieran ir los actores entre escenas.
La película tardó seis semanas en grabarse.
El guionista y director de la película, Jim Rash, ha dicho que la historia está inspirada en la primera escena, ya que él tuvo una plática parecida con su padrastro a los 14 años.
Sam Rockwell solía improvisar y jugar con el altavoz durante la grabación.
Steve Carell sólo aceotó el papel porque el lugar de grabación estaba cerca de donde suele pasar las vacaciones de verano con su familia.