En su momento y debido a los comentarios políticos que varios encontraron en la cinta, varios representantes del senado y otras autoridades asumieron, con cierta seguridad, que Chaplin era comunista, acusación que el actor siempre negó.
La cinta se filmó a lo largo de 10 meses, de octubre de 1934 a agosto de 1935. Esto, curiosamente, se considero un rodaje “rápido” para una cinta de Charles Chaplin.
Fue incluida, en 1989, por la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos, para su preservación en el National Film Registry.
Una de las inspiraciones que llevaron a Chaplin a realizar la cinta fue una plática que tuvo con Gandhi, quien mencionaba, con cierta alarma, como las maquinas estaban tomando el control sobre todo lo demás.