Nominada a 10 premios de la Academia, en 1961, la cinta obtuvo cinco premios: mejor edición, mejor decorado, mejor guion, mejor director y mejor película.
Fue incluida, en 1994, por la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos, para su preservación en el National Film Registry.
Tanto Billy Wilder como I.A.L. Diamond, el guionista, no permitían que existieran cambios, por menores que fueran, en el guion, lo que presentaba un problema con la actriz Shirley MacLaine, quien acostumbraba a improvisar un poco. Una simple escena en el elevador fue filmada en múltiples ocasiones porque la actriz decía una palabra diferente.
Con esta cinta, Billy Wilder fue el primer artista en obtener los premios más importantes de la Academia, como mejor director, mejor guion y mejor película (en su papel de productor)
En 1968, ocho años después del estreno de la cinta, se presento una adaptación al teatro, en formato musical, titulado Promises, Promises.