Crítica de SensaCine.com.mx para Extraordinario: Las ventajas de ser diferente

Cuando los protagonistas de las películas tienen alguna deformidad en el rostro, generalmente suelen ser personajes de ficción o fantasía como El Fantasma de la Ópera o El Jorobado de Notredame. Pero, ¿qué pasaría si el personaje principal con una malformación es un niño de 9 años?

Jacob Tremblay, quien se podría convertir en el actor más joven de la historia con una nominacion al Oscar, es el encargado de interpretar a Auggie Paulman en Extraordinario, un estudiante de quinto grado de primaria que sufre de una deformidad facial congénita y que es obligado por su madre a desarrollarse en el mundo real.

Pero no desesperen, esta no es una película de motivación o superación personal. La lástima no es el elemento que te hace romper en llanto cada cinco minutos. Lo que hace extraordinario a este filme (literal) es la empatía que se genera con el ser humano.

Las personas siempre le temen a lo desconocido, a lo que está fuera de su zona de confort, por lo que generalmente no saben cómo actuar cuando se encuentran frente a una persona enferma o con alguna discapacidad. Pero en esta película entiendes por qué el ser humano es así.

La personalidad del protagonista es realmente abrumadora y, de cierta forma, un cliché. El personaje que tienen que enfrentar las adversidades del bullying para convertirse en un modelo a seguir para el espectador, es algo que ya está más que visto en la pantalla grande.

Lo que vale la pena disfrutar son las perspectivas de los personajes que rodean a este pequeño. ¿Cómo esperas que un niño de 9 años reaccione cuando su nuevo compañero de banca tiene 27 cirugías en el rostro? ¿Cómo esperas que una adolescente comprenda que sus padres tienen que ponerle toda la atención a la malformación de su hermano y no a su crisis existencial?

En esta película no hay villanos ni héroes y el bullying no es el núcleo de la trama. El elemento que brilla en cada diálogo y escena es la complejidad del ser humano. Conocer lo que sucede en la vida íntima de cada persona nos ayuda a comprender el por qué de sus acciones y reacciones. Nadie está preparado para luchar contra una malformación, menos un niño de 9 años, pero lo que realmente importa es aprender a destacar con las cualidades que la vida le otorga a cada quien.

Personas como Auggie no están en el mundo para enseñarnos a valorar lo que tenemos,  si no para demostrarnos que para ser Extraordinario no se necesita ser igual a los demás.

Basada en la novela homónima de R.J. Palacio, cuenta la historia de un niño normal el cual disfruta de la saga Star Wars, en un experto en ciencia y sueña con ser astronauta, el único detalle que lo hace destacar, es su condición física. Ser diferente no se trata de ser el mejor, se trata de entender que para destacar no se necesita ser normal.