Entre 1944 y 1946, el cineasta y documentalista Manuel Hernández Sanjuán y su equipo, Hermic Films, se reunen para filmar y producir una serie de películas documentales sobre la Guinea Española, serie encargada por el General José Díaz de Villegas, director general de Marruecos y Colonias. Para la expedición, el cineasta busca la ayuda y guía de Angono Mba, un guineano conocedor de la zona. Pero había una motivación extra para la filmación: Hernández Sanjuán deseaba encontrar un misterioso y mítico lago, una especie de oasis natural, donde según leyendas africanas, solían juntarse 10 000 elefantes en perfecta armonía, formando uno de los paisajes y experiencias naturales más espectaculares de la historia. Años después, Angono recuerda ese viaje, las experiencias y lo que descubrieron a lo largo de la expedición.