SensaCine adapta la calificación de cada medio con una puntuación de 0.5 a 5 estrellas.
críticas de medios
Fotogramas
por Fausto Fernández
Dijo Preston Sturges que la comedia es el espejo que nos ponen delante justo en el momento que menos ganas tenemos de vernos reflejados. Evidentemente, Philippe de Chauveron, el director de 'Con los brazos abiertos', no es Sturges, pero sí que aplica esa máxima de incomodar al espectador a base de risas. Porque incómoda es la situación de este personaje, de izquierdas, liberal y tolerante (un Christian Clavier ya directamente convertido en Louis de Funès) que verá cómo su buenismo choca con la reali- dad. E incómodo es para el público ver que todos tenemos comportamientos racistas y burgueses. Aun siendo en el fondo muy inofensiva en su forma y en su desarrollo, esta prueba de fuego de un intelectual progresista aguantando en su jardín a unos gitanos rumanos nos hace mirar esa imagen de nosotros que no nos gusta, pero existe. La película aplica una implacable y muy divertida igualdad negativa: todos son egoístas, cicateros y aprovechados. Su idea o ideal de la convivencia y la concordia acaba resultando la mejor broma de todas.
La crítica completa está disponible en la web Fotogramas
El Mundo
por Francisco Marinero
El argumento da lugar a algunas situaciones divertidas y, sobre todo, al lucimiento de Clavier.
La crítica completa está disponible en la web El Mundo
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Fotogramas
Dijo Preston Sturges que la comedia es el espejo que nos ponen delante justo en el momento que menos ganas tenemos de vernos reflejados. Evidentemente, Philippe de Chauveron, el director de 'Con los brazos abiertos', no es Sturges, pero sí que aplica esa máxima de incomodar al espectador a base de risas. Porque incómoda es la situación de este personaje, de izquierdas, liberal y tolerante (un Christian Clavier ya directamente convertido en Louis de Funès) que verá cómo su buenismo choca con la reali- dad. E incómodo es para el público ver que todos tenemos comportamientos racistas y burgueses. Aun siendo en el fondo muy inofensiva en su forma y en su desarrollo, esta prueba de fuego de un intelectual progresista aguantando en su jardín a unos gitanos rumanos nos hace mirar esa imagen de nosotros que no nos gusta, pero existe. La película aplica una implacable y muy divertida igualdad negativa: todos son egoístas, cicateros y aprovechados. Su idea o ideal de la convivencia y la concordia acaba resultando la mejor broma de todas.
El Mundo
El argumento da lugar a algunas situaciones divertidas y, sobre todo, al lucimiento de Clavier.