Fue nominada a la Mejor película extranjera a los Premios César 2018.
Obtuvo ocho nominaciones en los Premios Magritte 2018 de Bélgica y ganó la estatuilla al Mejor diseño de vestuario y a la Mejor actriz de reparto para Aurora Marion.
Basada en una muy famosa historia real que sucedió en Bélgica en el año 2007.
El director no quería contar esta historia. "Todo cambió cuando conocí por casualidad al mejor amigo del hermano de la protagonista, quien de hecho está en la cárcel. Este amigo me decía “no puedes imaginar el amor que se tenían el uno al otro, eran muy cercanos y se amaban muchísimo”. Y yo me decía a mí mismo “No puede ser. Es una tragedia”. Eso me motivó a hacer la película."
Aunque el director no conoció a la familia, sí tuvo acercamiento con personas paquistanís que viven en Bélgica.