Es la ópera prima del director mexicano Alejandro Ramírez Corona.
Fue seleccionada para competir por el premio a mejor película en la edición 33 del Festival Internacional de Cine de Guadalajara.
Para crear el perfil de Mario Aburto, el director leyó los expedientes de la Procuraduría General de la República (PGR) porque contienen entrevistas que le realizaron en el momento en que lo detuvieron y existen charlas con los jefes de maquila.