Este es el primer largometraje del director Juan Cáceres.
La idea surgió cuando el director fue testigo de una desoladora escena en el centro de Santiago: un migrante llorando a mares la pérdida de su trabajo como heladero ambulante, tras ser detenido por policías que rompieron la caja térmica en que guardaba sus helados.
Decidieron hacer Perro Bomba como “una película que tuviese fines terapeúticos y que sirviera como un viaje imaginario para aquellos que no tienen el privilegio de un viaje físico”.
Encontraron al protagonista haciendo casting focalizado, investigando sobre películas y obras de teatro en la que participaran afrodescendientes.
Este es el debut del actor protagonista Steevens Benjamin.