Opiniones sobre Oblivion: El tiempo del olvido

“Oblivion” es una película tan extraña que aún no sé si me encantó o no, y con ello no quiero decir que no me haya gustado. El Plot Twist me fascinó, al igual que la lenta resolución del conflicto. Como ya es típico en el cine de Joseph Kosinski, una imagen dice más que mil palabras, y esta película tiene unos visuales hermosos, además de un diseño de producción impecable. En cuestiones técnicas es sobresaliente. Y narrativamente, aunque me parece sólida, sí me parece que alarga demasiado el misterio para mantener intrigado al espectador, y aunque lo logra, hay momentos que se sienten como Deux Ex Machina con justificaciones confusas para darle resolución al conflicto.

Algo que amo del cine de Joseph Kosinski es su ritmo. En ningún momento sus películas aburren y, aunque el planteamiento del conflicto es muy simple, le agrega capas de profundidad que hacen que te termine genuinamente interesando la historia y los personajes. Aunque Jack está lejos de ser uno de los personajes más icónicos de Tom Cruise, a medida que comprendemos al personaje y su corrupción tanto personal como externa, termina por convertirse en un protagonista que disfrutamos ver en cada escena.

Una de las cosas que no me gustaron de esta película fue su desarrollo. Por momentos (sobre todo en el primer acto) es muy lento, lo cual no me parece negativo, pero para el segundo y tercer acto la trama se agiliza demasiado, y hace que el Incidente Incitador no se sienta tan orgánico. Lo mismo sucede con el tratamiento de la fuerza antagónica, que no termina por tener una motivación totalmente clara y raya en lo superficial.

En términos generales, esta es una gran película Sci-Fi. Una historia de alto presupuesto, nueva, que no pertenece a ningún universo, con unos visuales y diseños de producción atractivos, un giro de tuerca que vuelve a este mundo aún más interesante y con un protagonista entrañable. Aunque tal vez no tenga una historia tan sólida, sí me parece lo suficientemente entretenida para pasar un buen rato y ver con buenos ojos una posible secuela. Este es el tipo de cine que, aunque no es perfecto, vale la pena apoyar, porque a diferencia de los cientos y cientos de universos que vemos cada año, este busca ser propositivo, y eso siempre se agradece.