Para los hermanos Isaac y Joey Eisch, su padre es un verdadero superhéroe, un soldado de primera clase del ejército norteamericano, condecorado y reconocido, quien combate y defiende a su país en Afganistán. Por años, los hermanos son cuidados por su madre o por otros miembros de la familia, mientras su padre está en servicio, regresando esporádicamente para convivir con ellos y obtener un momento de vida normal y pacífica. Sin embargo, cuando los hermanos son adolescentes, reciben la noticia que su padre ha sido herido gravemente en combate, perdiendo una pierna y dejándolo inhabilitado para regresar, por lo que es enviado a casa de forma permanente. El reencuentro obligatorio y oscurecido por las fatales consecuencias es la base para el documental La familia del soldado, donde las cineastas Leslye Davis y Catrin Einhorn siguen la nueva convivencia de esta familia, quienes buscan un sentido de justicia, de pertenencia y de redención bajo las consecuencias de la guerra.