El proyecto fue nominado a los premios Ariel, en 2020, en la categoría de mejor cortometraje documental.
La bruja de Texcoco se ha convertido en un artista admirado por la comunidad, con un proyecto musical definido con sonidos novohispanos, prehispánicos y populares mexicanos, que ha ido abriéndose espacio en la escena musical del país, cuya estética y letras han resignificado la concepción de la feminidad.
Estuvo presente en el festival FECIBogotá, en el Festival de Cine de Hidalgo y en el Qfest – Houston GLBT Film Festival, entre otros.