La historia toma varias experiencias reales de la guionista, Nancy M. Pimental, que tuvo con una amiga, la actriz Kate Walsh.
La cinta tuvo que esperar a que la actriz Cameron Diaz terminará sus compromisos con las cintas Pandillas de Nueva York (2002) y Vanilla Sky (2001)
Casi una tercera parte del presupuesto, que casi alcanzaba los 50 millones de dólares, fue para cubrir el salario de Cameron Diaz.
Segundo largometraje del cineasta Roger Kumble, después de su exitosa ópera prima Juegos sexuales (1999)