El monstruo diseñado para la película no tiene nada de parecido con el descrito en la novela de Mary Shelley, sin embargo se convirtió en la inspiración para cualquier adaptación futura del personaje.
Un micrófono fue puesto en el ataúd de la cena del funeral para aumentar el sonido de la tierra que cae sobre él.
Universal Studios es dueño del diseño del monstruo hasta el año 2026.
Boris Karloff interpretó al monstruo a los 44 años.
El nombre del protagonista de la novela de Shelley, Victor Frankenstein, fue cambiado a Henry porque consideraron que Victor era poco amigable para la audiencia.