Charles Dance afirmó que Woody Allen no le dio ninguna dirección para su actuación, y afirmó además que se le pidió que llegara al set con su propio traje y corbata, sobre el cual filmó su escena y se fue.
El personaje principal (originalmente un periodista hombre y adulto) fue diseñado específicamente para Scarlett Johansson.
Woody Allen fue instruido en magia e ilusión para la película por Scott Penrose.
Después de La provocación (2005), esta fue la segunda película de Woody Allen en Londres.
Aunque se filmó en Londres, la película es la segunda de las películas de Allen que no tiene un estreno en el Reino Unido.