Opiniones sobre Superman II: La aventura continúa

Menos propositiva narrativamente y con un conflicto más estandarizado para un blockbuster familiar, “Superman 2” es divertida, tiene sus buenas secuencias de acción y uno que otro chiste que es bueno. Pero se queda muy corta si la comparamos con su antecesora. Para mí el principal problema radica en que le quitaron el apartado sentimentalista del constructo de lo que define a una persona que decide actuar por lo correcto, para simplificarlo en un superhéroe que salva a las personas, “porque es su obligación”. Pero rescato que a diferencia de la primera parte esta le toma más importancia en lo que quiere Clark Kent.

Para mi un apartado que le resta a esta cinta es el Incidente Incitador de varios personajes, por ejemplo Lex Luthor es malo porque tiene que serlo, lo redujeron a un antagonista de malolandia sacado de la serie de los 60’s de Batman, y aunque en mayor parte de la película el personaje de Louis Lane me gustó, siento que faltó una mayor intencionalidad narrativa en sus acciones, tiene escenas que sobre pasan la ficción presentada cómo, cuando se deja caer del edificio, y en el primer y parte del segundo acto no tiene su rol bien definido con Clark Kent y posteriormente Superman. Aún así las motivaciones de los antagonistas me parecieron correctas, cómo el dilema moral de Clark en intentar encajar en este mundo, aunque sus “responsabilidades” no se lo permitan; un argumento que casi 20 años después de su estreno se volvió norma en cómo desarrollar a un héroe en su segunda entrega.

Con lo que me quedo de esta segunda entrega está en que reafirma el mensaje de la primera parte sobre que lo que nos hace especiales de diferentes maneras está en nuestro interior, creando una contraposición con los antagonistas de esta, que, aunque tuvieran las mismas habilidades sorprendentes de nuestro héroe , y lo superaran en número, este resultó vencedor por lo puro y desinteresado de sus acciones, dando con cierre al arco narrativo de nuestro protagonista en la historia, en la que decidió anteponer un bien general que uno propio.
Superman II expresa de manera genuina cómo nuestra fuerza proviene de la persona que decidimos ser, y no en lo que aparentamos ser.