Un psicoanalista que debe cumplir con horas comunitarias debido a un accidente de tránsito es obligado a dar acompañamiento terapéutico a un inspector de la policía que se encuentra devastado tras haberse enterado de la infidelidad de su esposa. El inspector no logra concentrarse en su trabajo y de repente se ve afectado por una ola de sentimientos mientras realiza las investigaciones a las que ha sido asignado, por lo que el terapeuta debe ayudarlo a lidiar con su corazón roto y que así éste pueda enfocarse en su trabajo. Sólo que estas terapias y acompañamiento los transforma en un nuevo dúo de investigadores que terminan envueltos en una peligrosa conspiración que pondrá en riesgo la seguridad del país. ¿Podrán un psicoanalista nervioso y un detective con el corazón roto ser los nuevos héroes que el país necesita?