Eduardo Borges es un hombre que pareciera tenerlo todo, pues es bastante inteligente, exitoso, sensible y muy atractivo. Sólo que detrás de esta imagen de hombre perfecto se esconde su verdadera personalidad, pues Eduardo usa sus encantos para cometer una serie de crímenes, por lo que en la actualidad es uno de los asesinos seriales más buscados. Éste se dedica a matar por puro placer y la novia que tiene, Ray, desconoce por completo lo que Eduardo realmente hace, ya que ella está cegada por la perfección que ha hallado en él e incluso se deja manipular por él ya que justifica que su pareja sólo busca el bienestar de ella. Por el momento, ni la policía ni nadie tienen idea de que el homicida suelto en realidad es un hombre que proyecta una imagen de perfección, así que dentro del cuerpo policíaco se crea un equipo encabezada por el jefe Dias, quien junto a la psicóloga Vera, quien es especialista en conducta criminal, intentarán destapar al culpable y arrestarlo. Entre Vera y Dias existió un romance en el pasado que no terminó tan bien, pero intentarán que sus asuntos personales no afecten esta nueva misión. Cada paso que los detectives dan para atrapar a Eduardo, éste los sorprenderá con más cosas, pues está decidido a no dejarse atrapar así que les pondrá una decena de trampas y juegos mentales.