Durante el terrible genocidio ocurrido en Ruanda en 1994, la pequeña Kate Ashby quedó huérfana. Tras sobrevivir la masacre, Kate fue adoptada por Eve Ashby, una abogada internacional que se dedicaba a tratar con varios casos de ese país. Años después, la joven se convirtió en una investigadora legal que trabaja en un bufete de abogados que representa casos que violan los derechos humanos. Todo pareciera marchar bien para Kate. Sin embargo, los fantasmas del pasado la persiguen cuando su madre acepta un nuevo caso que vincula a un militar con el terrible caso de Ruanda. Es así como la joven tendrá que usar sus habilidades para conseguir una poco de justicia con su pasado.