Los actores Rick Gomez y James Madio formaron lazos durante el entrenamiento del campo de acondicionamiento. A medida que avanzaba la serie, descubrieron que sus personajes también habían sido mejores amigos en la vida real.
Casi todos los actores principales fueron elegidos debido a su gran parecido físico con los soldados de la vida real que estaban interpretando.
En ese momento, con un presupuesto de $104 millones de dólares, que finalmente fue aumentado a $120 millones.
Una intensa jornada de filmación requirió hasta catorce mil cartuchos de munición.
Todos los 1200 trajes de civil fuerom auténticas prendas de época.