Nana por la profesión que lleva, ser doctora especialista en fertilidad, está acostumbrada a escuchar las historias de sus pacientes que están a punto de convertirse en madres, debido a que ella busca crearles confianza para que durante la labor de parto todo salga excelente; les inventa historias sobre cómo fue su embarazo, cómo dio a luz y lo que sus hijos hacen en la actualidad. Ella ve con inocencia las historias de mentira que les cuenta a estas mujeres, así que el día en que verdaderamente se embaraza, Nana pondrá a trabajar toda su imaginación para que nadie descubra que pronto ella será quien dará a luz. El motivo principal por el que no quiere que en su trabajo y círculo cercano se enteren que está esperando un bebé, es porque le da vergüenza explicar la forma en la que se embarazó, pues una noche estando ebria decidió inseminarse con el esperma de su ex novio que había guardado. Ahora tendrá que lidiar con las consecuencias de sus acciones y confesarle a su ex que está esperando un hijo de él, pero ¿logrará hacerlo?