Michelle Rodríguez desde pequeña tenía el gran sueño de convertirse en actriz y comediante, pero debido a los prejuicios de la sociedad, los estereotipos y señalamientos con los que creció nunca creyó que fuera posible ese sueño hasta que un día decidió arriesgarse. Dado a que Michelle solía ver en la televisión a actrices blancas con cabelleras rubias y ojos de color, a ella y los demás a su alrededor les parecía imposible que algún día pudiera incursionar en este mundo, pero Michelle no se rindió y a partir de esas diferencias que tanto la caracterizan es como logrará demostrarle a los demás y a sí misma que puede cumplir ese sueño. Pasará por diferentes situaciones que la pondrán a prueba y a veces la desanimarán, pero Michelle también hallará en ese camino cierto autodescubrimiento y mucho amor con el que podrá brillar. Se dará cuenta que al final su talento, seguridad, ingenio y el trabajo duro que realiza a diario la llevarán a lugares inimaginables.