El tener casa propia es algo que causa plenitud, estabilidad y seguridad, pues el poder ocupar un espacio que puedas hacer tuyo es algo que la mayoría de personas en el mundo quieren. Es por eso que la ama de casa de esta historia se encuentra feliz por poder ser la dueña de su hogar, ya que al fin tiene la casa que tanto tiempo soñó. Pareciera que para esta mujer su fuente de felicidad viene de su hogar, pero un día las cosas comienzan a cambiar para ella y se va dando cuenta que aquella vida perfecta que creía tener no es del todo cierta. Ella empieza a distorsionar la realidad que poseía y toda esa felicidad comienza a desvanecerse de a poco dando paso a algo más oscuro y misterioso, de pronto su hogar va a pasando ser una prisión de la cual querrá escapar.