Cecilia y Carmem son dos hermanas que se vieron atraídas a los supuestos milagros que el curandero João Teixeira de Faria se encargaba de realizar, mejor conocido como João de Deus (Juan de Dios) este hombre ganó gran popularidad en la ciudad de Abadiânia donde se encontraba asentado, aunque también en todo Brasil y el resto del mundo por lo que Cecilia y Carmem no quisieron quedarse atrás y viajaron para conocerlo. Las personas que llegaban con João de Deus se les ofrecía curación y refugio en uno de los centros que éste había construido, así que de entrada las dos hermanas se dispusieron a confiar en sus palabras, tal cual otras cientas de personas igual lo habían hecho, y se quedaron bajo su cuidado, pues fervientemente creían que su vida mejoraría y se encaminaría a un mejor futuro. Sólo que al poco tiempo, Cecilia se dio cuenta que el sitio en el que ella y su hermana se encontraban no era nada seguro, ya que en realidad João de Deus era un abusador sexual y criminal disfrazado de mensajero de Dios. Cecilia ya no quiere seguir estando cerca de este hombre, así que logra huir a Lisboa, pero su hermana menor Carmem se queda con el curandero ya que ella está cegada por el fanatismo y se convierte en una empleada leal. Sólo que luego de 17 años, Cecilia logra volver para rescatar a su hermana menor y mostrarle la realidad del monstruo que es el líder religioso al que alaba, pues éste abusó de más de 300 mujeres y Carmem debe salir de aquel sitio tan peligroso a como dé lugar.