Rigoberto Urán nunca imaginó de pequeño que terminaría pedaleando por todo el mundo, pues lo cierto es que su padre desde muy chico le transmitió ese amor por la bicicleta. Originario de Colombia, Rigo ha tenido una vida llena de altibajos, pues la guerrilla no ha sido sencilla de sortear por todos los peligros que representa. Él ha guardado la promesa de cuidar a su mamá y hermana menor, así como terminar el bachillerato y perseguir su pasión por la bicicleta. Sólo que antes de convertirse en uno de los ciclistas más reconocidos en el mundo tuvo que lidiar con varias personas que no querían verlo salir de Colombia, pues hay un usurero que se quiere quedar con la casa en la que ellos viven. Además, las docenas de malabares como trabajos que debe hacer con tal de sobrevivir le muestran a Rigo cómo nunca debe rendirse para perseguir sus sueños, pues así como un día puede estar pedaleando por su barrio vendiendo lotería, al siguiente puede estar en Europa en una de las principales carreras subiendo al podio. Rigo hará hasta lo imposible para cumplir cada uno de sus sueños y su gran amor de la infancia también será uno de sus motores para no rendirse.