En el pueblo de San Juan, las buenas costumbres y tradiciones en realidad guardan toda clase de pecados y traiciones que llevarán a una familia y sus personas cercanas a atravesar las experiencias más crudas e injustas, todo por la simple ambición y egoísmo. Armando Quiroga es el patriarca de la familia Quiroga Cáceres, él también es director de la empresa La Magnolia, que en realidad pertenece a su esposa, Estela, pero por el amor y confianza que le tiene, ella lo ha nombrado el director de ésta y confía en su liderazgo. Sólo que Armando es un hombre ávaro y que tan sólo le interesa tener más poder, ni siquiera se preocupa por su familia, pues para él el dinero y el estatus lo es todo. Cuando su hija Elsa se enamora del joven Andrés, quien proviene de un familia humilde, Armando hace hasta lo imposible para separarlos, sembrándole miedo y mentiras a Andrés, a quien busca desterrar o encarcelar; además a Elsa la manda a un convento para que así nunca vuelva a cruzarse con el chico, pero su amor no será tan fácil de vencer a pesar de cada obstáculo que se les presente. Elsa no será la única que sufra a causa de su padre, pues Estela también verá su vida comprometida ya que Andrés quiere quedarse con todo lo que le pertenece y no le importará traicionarla o encerrarla en un psiquiatrico, pues a este hombre no le interesa a quien se lleve por en medio si estas personas interfieren con sus objetivos. Elsa y Estela deberán hallar una manera de librarse del yugo de quien se supone sería el hombre en el que más confiarían.