Cuando pensamos en Harry Potter, es imposible no imaginar a Emma Watson interpretando a la brillante y valiente Hermione Granger. Durante más de una década, la también actriz de La bella y la bestia dio vida a uno de los personajes más queridos de la saga, convirtiéndose en un ícono de la inteligencia, la lealtad y el empoderamiento en el cine. Desde el momento en Harry Potter y la piedra filosofal al corregir a Ron Weasley con el hechizo de "Wingardium Leviosa", hasta enfrentar a los horrocrux de Lord Voldemort, Hermione es un ícono irremplazable en la saga.
Sin embargo, a pesar de haber protagonizado innumerables momentos inolvidables en la franquicia, hay una escena en particular, considerada una de las más emotivas de Hermione, en la que Emma Watson en realidad no estuvo presente. Para la tristeza de los fanáticos de Harry Potter, una de las secuencias más conmovedoras de la saga no contó con la participación de la actriz que encarnó a Hermione en todas las películas. Y lo más sorprendente es que muchos fans nunca lo notaron hasta ahora.
La escena en cuestión pertenece a Harry Potter y la Cámara Secreta, donde Hermione, junto con Harry y Ron, decide preparar la poción multijugos para infiltrarse en la casa de Slytherin y obtener información de Draco Malfoy. Mientras que Harry y Ron logran transformarse en Crabbe y Goyle sin problemas, Hermione comete un error crucial: en lugar de tomar un cabello de una chica de la casa de Slytherin, sin darse cuenta, usa un pelo de gato. Como resultado, su transformación sale terriblemente mal y termina con orejas puntiagudas, un hocico felino y un pelaje que cubre su rostro.
Harry Potter
¿Por qué Emma Watson no grabó esta escena? El motivo de su ausencia no tuvo nada que ver con conflictos de agenda o efectos especiales complicados, sino con una razón completamente inesperada: Emma Watson era alérgica a uno de los componentes del pegamento que se utilizaba en el disfraz de gato. Durante las pruebas de maquillaje, el equipo de efectos especiales descubrió que la actriz presentaba una reacción alérgica al adhesivo utilizado para fijar las prótesis en su rostro.
Como resultado, los productores decidieron que era más seguro para su salud utilizar a una doble de cuerpo para la escena en la que Hermione aparece con su transformación fallida. Para lograr una buena toma, la producción filmó las reacciones de Ron y Harry al ver a Hermione convertida en gato y, en las tomas donde el personaje está completamente transformado, usaron a una actriz con un disfraz completo, asegurándose de que el público no notara la diferencia. De hecho, el uso de sombras y ángulos estratégicos ayudó a hacer la ilusión más convincente.
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A pesar de esta curiosidad detrás de cámaras, nadie puede negar que Emma Watson es y siempre será Hermione Granger. Su interpretación del personaje a lo largo de ocho películas fue impecable, dándole vida a una de las brujas más icónicas de la literatura y el cine. Su dedicación, carisma y talento hicieron que Hermione se convirtiera en un símbolo de inteligencia, valentía y amistad para generaciones de fans.
