Para todos los que pensaban que la saga de los héroes favoritos del público había perdido fuerza, están muy equivocados. El Universo Cinematográfico de Marve se está revitalizando con una serie de producciones que prometen mantenernos al borde del asiento. El mundo ya ha sido testigo del estreno de Capitán América: Un nuevo mundo, donde Sam Wilson, interpretado por Anthony Mackie, tomó el escudo y enfrenta nuevos desafíos, incluido Red Hulk de Harrison Ford.
Lo cierto es que esto es sólo el comienzo, ya que en el horizonte se vislumbran títulos como Thunderbolts y la tan esperada introducción de los Cuatro Fantásticos a la aclamada franquicia de superhéroes. Pero la emoción no se limita a lo que ocurre únicamente en la pantalla grande. El mundo del streaming también está siendo testigo de grandes producciones que buscan satisfacer a los seguidores más exigentes. Y una de las más destacadas es, sin duda, Daredevil: Born Again, la serie que marca el regreso del vigilante ciego de Hell's Kitchen a nuestras pantallas, esta vez a través de Disney+.

Los primeros dos episodios de Daredevil: Born Again ya están disponibles en la plataforma de la Casa del Ratón, y como era de esperarse, han generado una ola de reacciones intensas entre la crítica y el público. La expectativa era alta, especialmente después de la aclamada serie de Netflix que dejó una marca imborrable en los fans. Ahora, con Charlie Cox retomando el papel de Matt Murdock y Vincent D'Onofrio encarnando nuevamente al imponente Wilson Fisk, las opiniones han sido variadas y apasionadas.

Algunos críticos han elogiado la serie por mantener la esencia trágica y compleja de Matt Murdock, heredada de la producción de Netflix. Las escenas de acción, descritas como "brutales y emocionalmente impactantes", han sido comparadas favorablemente con las de la serie original.
Sin embargo, no todas las opiniones han sido positivas. Algunos señalan que la serie lucha por mantener la energía y profundidad temática de su predecesora, aunque sin lograrlo con éxito. A pesar de mantener algunos elementos estéticos de la serie original, muchos consideran que carece de secuencias de pelea impactantes y una narrativa coherente.

A pesar de las visiones divididas, muchos reconocen que la serie mantiene el tono sombrío que la convirtió. La química entre Cox y D'Onofrio sigue siendo un punto fuerte, y la exploración de temas como la lucha interna de Murdock, entre su carrera legal y su identidad como vigilante, añaden capas de complejidad a la trama. Lo que es innegable es que la serie ha reavivado el interés en el "Hombre sin Miedo" y ha generado debates apasionados sobre la dirección que está tomando el UCM.
